domingo, 31 de mayo de 2009

Morir de amor




Morir de amor, es sentir que todo se resbala entre tus manos, que como las gotas fluyen en el pétalo de flor, la vida escurre en el corazón


Morir de amor, es padecer eternamente entre las agujas del hielo y la indiferencia, es padecer entre el terror de perderlo y las ansias de volver a verlo

Morir de amor es sentir que ya diste la última gota de esperanza, como también ya lloraste la última lágrima la cual la necesitabas ahora


Morir de amor, es sentir que se detiene el bombeo del corazón del alma y se para la respiración del espíritu acalambrado del dolor


Morir de amor, es llenar el vacio del alma, con el más doloroso ardor de todos los infiernos habidos y por haber.


Morir de amor, es sentirte hueco por dentro, sentir que todo lo que tenía su lugar se desvaneció dejando un espacio inconcluso, ni siquiera suficiente para el dolor


Morir de amor, es desfallecer sin tener tiempo para contra argumentar, para debatir contra tu propia mente deformada por la dolencia


Morir de amor, es sentir que ya no puedes siquiera tomar su mano otra vez, que ya no será esa mano la que te baje los ojos cuando el corazón se te congele


Morir de amor, es pensarlo por última vez, tratar de simular que está ahí, pero aún sabiendo que sólo es el triste y recóndito fantasma del pasmoso pasado


Morir de amor, es saber que el mayor daño te lo hizo aquél por el cual ahora te sientes taciturno y quebrado por dentro, pero aún así, lo sigues amando hasta el último soplo


Morir de amor, es saber que cuando tu alma dolida, destrozada cierre los ojos, seguirá pensando en sus manos, en su boca, en sus caricias, por lo tanto se transforma en una eterna tortura


Morir de amor, es creer que la ternura de los años, esa ternura que guardaba tan celosamente sus besos, se transforma en un masoquismo al quererlo y al amarlo, al anhelarlo y pensarlo


Morir de amor, es simplemente, lo que el corazón del demonio, lo que sus ojos disfrazados de cariño, me provocaron al tocarme, al besarme por primera vez


Morir de amor, es quitarme todo lo que me dio, de golpe y sin compasión...


quedé....
Convertida en hieloo!!!

3 comentarios:

  1. Brindemos con copas vacías, por aquellos que hemos muerto de amor, porque en nuestra siguiente vida (que vivimos en esa vda biológica menos dolorosa que la espiritual), esas copas vacías se llenes de gozos. Y si volvemos a morir, que no se pierda en los labios el sabor de las alegrias pasadas ni en la garganta el refrescante pasó de las memorias, que aunque lentamente, hacen ceder al dolor tarde o temprano.
    Un blog curioso el tuyo, mezcla de tantas emociones que es imposible no pasearse por aqui con gusto.
    Buen karma!!

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  2. cada vez que leo tus publicaciones me gustan mas.
    sigue asi

    cuidate.

    ..................Loima Dácrapa...............

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  3. gracias..... saes a mi tmb me gusta tu blog..... escribes cosas super cheveres e interesantes....sigue asi!!!XD....
    --->toxic<---

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